Aunque la pasión por la radio genera casi siempre calores en la cabina, no nos vamos a referir en esta pregunta a ningún ardiente periodista ni a los fervores que levantan las sensuales voces de algunas animadoras. La cabina caliente es aquella con un solo espacio para locutar y manejar los controles. No hay vidrio ni separación entre los dos ambientes.
CABINA CALIENTE EN EL ESTUDIO MASTER
Este tipo de cabinas vivas o calientes permite interactuar más entre técnicos y locutores y locutoras, entre entrevistadores y entrevistados, que estarán todos juntos, generando un ambiente más cálido y de mayor confianza.
Una forma muy común de trabajar en estas cabinas es el autocontrol, donde los locutores o las periodistas operan a la vez que hablan, haciendo ellos sus programas sin necesidad de un técnico. El autocontrol no se realiza sólo en cabinas calientes. Muchas radios que tienen vidrios de separación en la cabina, instalan un micrófono sobre la mezcladora para hacer el programa directamente desde los controles.
Con la llamada radiofórmula o programas musicales se comenzó a trabajar en autocontrol. Más tarde, esta práctica se masificó con la incorporación de las computadoras a la radio.
Haciendo autocontrol. http://www.isftic.educacion.es/
LA REGLA DE LAS TRES “A” PARA REALIZAR AUTOCONTROL
- Usa siempre audífonos. Si trabajas con altavoces se producirá una retroalimentación provocando un acople o feedback. A muchos locutores de la “vieja guardia” les encanta ese leve eco que se escucha cuando hacen eso. Además de trabajar con alto riesgo de que se acople del todo, a nadie le gusta escuchar una emisora donde el locutor parece estar hablando desde una cueva.
- Instala un cartel de al aire en la puerta o un bombillo rojo que avise que estás transmitiendo. Así, los despistados no entrarán gritando en mitad del programa.
- No pierdas nunca la atención. Hay que ser medio malabarista para estar pendiente del teléfono, la computadora, los invitados e invitadas y, además, locutor con gracia.
CABINA CALIENTE DE PRODUCCIÓN
Uno de los grandes quebraderos de cabeza a la hora de instalar un estudio de producción es el espacio. Muchos de estos estudios se montan en un cuarto desocupado de la radio o de la casa, incluso un cuarto de baño puede ser adaptado para este fin. En la mayoría de los casos, son lugares reducidos donde es muy complicado dividir con una pared y su vidrio el control del locutorio.
Pero no hay problema. Es posible instalar todo en el mismo lugar sin necesidad de dividirlo en dos. Con una mesa para los equipos y un buen acondicionamiento acústico es suficiente.
Forra bien toda la sala con materiales absorbentes de audio, como espumas acústicas o alfombras. Ubica la computadora en el lugar más alejado de los micrófonos y procura que los ventiladores internos no hagan ruido, ya que al trabajar con micrófonos de condensador podría colarse ese zumbido en la grabación.
Locutoras, actores, quien graba y quien dirige, todos y todas estarán en el mismo espacio. Esto facilita la interacción del grupo. Ganas espacio y comodidad, cosa que se pierde con una pared y un vidrio intermedio. ¡Y listo!... A calentarnos con la pasión de la radio.
Cabina caliente de producción de Radialistas Apasionadas y Apasionados.
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